En los medios

30/06/13
Especulativa y sin un marco legal
Prof. Emilio Espino. El autor es profesor e investigador de la Universidad Torcuato Di Tella
Para entender la economía del Bitcoin hay que repasar el rol del dinero tradicional, que hoy en día no es convertible a ningún otro bien (como el oro) a un valor cierto. Su único rol es permitir la realización de ciertas transacciones. Si Valentina quiere venderle su raqueta a Bautista, pero éste no dispone de ningún bien que le sea de interés, el intercambio fracasaría.
En cambio, si Bautista tiene dinero, el intercambio se realiza luego de acordar un precio en estas unidades. Valentina acepta estos papeles sólo porque espera que le sean aceptados en futuras compras. Cuando el dinero es emitido por los gobiernos, éstos garantizan dicha aceptación futura aunque no sea convertible.
El Bitcoin es peculiar: las transacciones se hacen directamente entre personas, donde el comprador le transfiere digitalmente estas "monedas" al vendedor. Se aceptan porque se espera que en el futuro sean aceptadas para una nueva transacción. Es decir, sólo tienen un valor especulativo porque los poseedores de bitcoins piensan que las pueden vender. Su oferta esta predeterminada por una estricta regla de "emisión". Esto, a priori, garantizaría su aceptación y la inexistencia de procesos inflacionarios. Esta virtud es sólo aparente, ya que su valor depende de las expectativas antes mencionadas, y esa clase de instrumentos son vulnerables a fluctuaciones en el precio.
¿Qué futuro le depara a un medio de pago costoso de crear, con valor sólo especulativo, del cual nadie es responsable y sin un sistema legal que regule su operación? A menos que permita hacer transacciones que otros medios de pago no logren (algunos sospechan que ilegales) es difícil imaginar que tenga una aceptación generalizada por mucho tiempo..