Extensión


La Escuela de Arquitectura y Estudios Urbanos concibe la extensión como espacio donde se redefinen operativamente y se hacen públicos los problemas de la investigación. Mediante la extensión se construye una vía de proyección e inserción de las agendas en desarrollo en la Escuela en la sociedad, proveyendo, de manera mediada, un servicio a la comunidad. De este modo se articulan y establecen formas de influencia mutua en ambos sentidos, permeando ideas entre ámbitos académicos y sociales, y retroalimentando los proyectos producidos en base al contacto con actores externos. En este contexto, las actividades de extensión persiguen una agenda tanto de comunicación como de renovación temática, modal, relacional y operativa.

La Escuela fomenta, en particular, las actividades culturales y de extensión cuyos campos temáticos gravitan en torno a cuestiones de relevancia disciplinar contemporánea. En términos de diferenciación modal, las actividades de extensión singularizan ideas y proyectos dentro de contextos intelectuales particulares, o funcionan parasitariamente respecto de debates ya existentes. La diversificación relacional se persigue a través de la vinculación con estructuras, académicas, profesionales, de organismos públicos o de empresas privadas con temas de interés en común con las investigaciones de la Escuela. Para la diversificación operativa, se promueven cruces entre profesores y alumnos, y personas o grupos provenientes de esas estructuras.

Las actividades de extensión congregan dominios tradicionalmente segregados: la academia, el proyecto, la cultura, la práctica. Estas iniciativas incluyen colaboraciones con instituciones para la realización de proyectos de cooperación, cursos y workshops abiertos, intercambios de alumnos de la Escuela y de universidades del exterior, prácticas profesionales de alumnos en organizaciones de distinto orden, consultorías de profesores, aplicación de subsidios públicos, y recepción de donaciones y adquisiciones de archivos. Las colaboraciones apuntan a la realización de actividades académicas que, por su apertura a participantes externos, se proyectan en un dominio cultural amplio. Los intercambios se realizan a través de convenios con universidades extranjeras que ofrecen experiencias formativas con crédito curricular a los alumnos que participan. Las prácticas profesionales se vinculan a propuestas académicas que se desarrollan en la Escuela y se expanden como experiencias prácticas para los alumnos. Las consultorías de profesores parten de propuestas académicas y se extienden con el ofrecimiento de servicios proyectuales a organizaciones externas. La aplicación de subsidios públicos en actividades de extensión complementa el financiamiento de proyectos académicos en cumplimiento de los requerimientos habituales de los organismos que otorgan fondos. La recepción de donaciones y adquisiciones de archivos consolida el proyecto académico de la Universidad como institución de investigación y como referente de acervos de valor cultural en la región. Estas modalidades y los dominios que congregan se abren a tendencias dispares, tanto autónomas como heterónomas que abarcan desde la crítica hasta la operatividad.


El Centro de Estudios de Arquitectura Contemporánea, con su amplia agenda de eventos abiertos al público, es clave como vehículo de articulación de estos diálogos.