En diálogo con Radio Sudamericana el economista Andrés Borenstein, realizó un análisis de la situación económica de la Argentina en el marco del nuevo Gobierno de Javier MIlei a partir del 10 de diciembre.

“Desde lo económico el país está roto, no s que hay que resolver un temita y con eso estamos “ok” pensemos que tenemos 180 de inflación, hace 12 años que la economía del país no crece, tenemos 20 tipos de cambio diferentes, no tenemos acceso al crédito y esto no se resuelve con que venga alguien que más o menos entienda del tema y entonces en un mes vamos a estar “ok”, esto requiere mucho esfuerzo de la sociedad, requiere un plan integral y requiere gobernabilidad”, explicó el especialista.

En este sentido agregó “se requiere un manejo eficiente de las expectativa, de la política de la comunicación y por eso para mí es complicado por lo que la palabra de incertidumbre tiene sentido”.

Inflación

A su vez Borenstein se refirió a los dichos de Milei, quien aseguró que llevará entre 18 y 24 meses bajar la inflación a niveles internacionales: “Hay una parte de la sociedad con impaciencia porque la está pasando mal, por eso lamentablemente tiene que bajar la expectativa y al mismo tiempo tiene que dar esperanza porque la inflación va a subir los próximos meses”

“La incertidumbre es si va a subir como parte de un tratamiento correcto que en el mediano plazo lleve a que baje la inflación o va a subir y va a seguir subiendo, tengo fe que sea lo primero pero obviamente los procesos de estabilización son difíciles y no hay soluciones mágicas”, remarcó.

Vínculos con Brasil

Otro de los temas que el economista desarrolló fue el vínculo de Argentina con Brasil y en este aspecto manifestó: “La química entre Milei y Lula no será óptimas, pero la relación entre Brasil y Argentina es de largo plazo que va más allá de los presidentes de turno. Es posible que el Mercosusr no sea prioridad de Milei pero la relación con Brasil es muy de largo plazo y en cierta medida hoy Lula está muy volcado a Irán, Rusia y en ese sentido Milei, sacará a la Argentina de esa agenda y eso me parece positivo”.