Di Tella en los medios
El Cronista Digital
21/02/20

Aun con temor de default, los bonistas todavía creen probable un acuerdo satisfactorio

Por Maria Iglesia

"La intención del gobierno de posponer el pago de la deuda durante su mandato será difícil de reconciliar con la demanda de los acreedores", opinó Eduardo Levy Yeyati, decano de la Escuela de Gobierno y director del Centro para la Evaluación de Políticas basadas en la Evidencia (CEPE).


La decisión por parte del Fondo Monetario Internacional de colocar la deuda argentina como insostenible y pedir una quita a los acreedores privados causó sorpresa en algunos bonistas y analistas, mientras que para otros se trató de una declaración previsible en la reestructuración de la deuda.

Si bien el mercado reaccionó con una suba del riesgo país de un 2% hasta los 2094 puntos básicos, algunos actores del mercado creen que los precios de los títulos argentinos ya anticipaban el mensaje del FMI y aún conservan una perspectiva positiva sobre la renegociación de la deuda.

"Entiendo que la deuda, por la suba del tipo de cambio, haya crecido, pero me da curiosidad entender por qué ahora el FMI hizo esta declaración", sostuvo Hans Humes, CEO de Greylock Capital, ante la consulta de El Cronista.

Aún así, el líder de uno de los grupos de acreedores privados dijo que aún cree posible que se dé una reestructuración exitosa y que es importante que la Argentina retome la senda del crecimiento económico y vuelva a acceder a los mercados internacionales de crédito. "Martín Guzmán está al tanto de qué es lo que se necesita hacer", señaló. "Podemos trabajar todos juntos, con el FMI y el Gobierno", dijo.

Sin embargo, consideró que es importante que tanto la Argentina como la provincia de Buenos Aires presenten sus propuestas económicas para avanzar con la renegociación. "Cuanto más tiempo esperemos, más barreras habrá", aseguró. Un representante de un banco privado consultado ayer coincide en que hay más chances de éxito en la reestructuración de la deuda. "Las tres partes interesadas tiene para salir ganando, ya que con un default todos perderían", delimitó. No por eso subestimó la dificultad que atraviesa el país. "La Argentina está caminando sobre el filo: si se cae del lado del escenario bueno, todo debería funcionar; no así si sucede lo contrario", mencionó.

Los analistas consultados por Bloomberg definieron que "los temores de los tenedores de bonos privados se han hecho realidad", según dijo Jimena Blanco, directora de investigación política de América Latina en la consultora Verisk Maplecroft. "El Fondo los arroja debajo del colectivo para salvar su posición. La quita tiene que venir del sector privado ", agregó.

En la misma línea, Walter Stoeppelwerth, Director de Inversiones de Portfolio Inversiones personales sostuvo que "el hecho de que sea política y económicamente imposible para Argentina constituir un superávit primario es una ruptura total y total de la norma de las relaciones del FMI con otros deudores de mercados emergentes que están pasando por una reestructuración". Y ejemplificó que "en una teoría del juego de tres, tienes dos alineados buscando poner al tercer jugador en jaque mate".

El economista Eduardo Levy Yeyati calificó que "la intención del gobierno de posponer el pago de la deuda durante su mandato será difícil de reconciliar con la demanda de los acreedores y algunos pagos deberán ser instrumentados, o con un interés bajo o, un poco menos probable, con un pago inicial".