Di Tella en los medios
Apertura revista
20/05/19

Manual para sobrevivir al primer año de un emprendimiento: el caso de Zana

Por Florencia Radici y Eugenia Iglesias

Zana, una empresa de healthy vending, es liderada por una dupla femenina, una de las cuales es emprendedora ditelliana: Martina Curi, graduada de la Lic. en Economía Empresarial. Junto a Victoria Cichero, emprendieron este negocio que consiste en alquilar máquinas expendedoras de snacks saludables, incorporadas en los últimos días por la UTDT para beneficio de alumnos y profesores. Así, la Di Tella se suma a la tendencia de la alimentación consciente que viene haciendo furor en los últimos años. Lejos quedaron las máquinas expendedoras tradicionales de golosinas y gaseosas.


Zana: Resignar hoy para ganar mañana 

En enero del año pasado, Martina Curi y Victoria Cichero dieron los primeros pasos con Zana, su emprendimiento que propone el alquiler de máquinas expendedoras de snacks saludables para oficinas y universidades. En mayo compraron la primera máquina, que venía importada de Italia, en dólares. Invirtieron U$S 10.000 en cada una. Hicieron el Excel con su plan de negocios y establecieron un fee mensual para cada cliente –por supuesto, en pesos. Para agosto, la devaluación puso sus cálculos patas para arriba. “Tuvimos una charla y nos preguntamos: ‘¿Hasta dónde podemos aguantar?’”, recuerda Cichero.

Las emprendedoras, que habían conseguido U$S 100.000 de friends and family para dar vida al negocio, tuvieron que ser ágiles y tomar decisiones rápidas para tratar de salir lo más airosas posibles de un contexto dominado por la incertidumbre. El primer dilema fue si acompañar la suba del dólar con ajustes en los alquileres de sus clientes o esperar. Optaron por no aumentar y resignar márgenes con tal de fidelizar a los primeros clientes que habían confiado en ellas.

“En un contexto de crisis, la gente deja de consumir todo lo que no es necesario. Por eso tratamos de armarnos la espalda para no trasladarles al consumidor final y a nuestros clientes el nivel de aumento de los productos y ni hablar de la inflación”, explica la fundadora del emprendimiento cuyo negocio viene del fee de alquiler y de la venta de productos. En este punto, también se debatieron hasta dónde aumentarle al consumidor, porque por el tipo de producto muchos de sus proveedores son pequeños y se encontraban en la misma situación. “Hablamos con los productores y fuimos charlando plazos de pagos. Por suerte tenemos un vínculo con muchos, que también son emprendedores”, agrega Curi. La estrategia, analizan hoy, dio resultado porque este año, a la hora de pasar los aumentos, la recepción fue buena.

A pesar de que vivieron semanas complicadas, tratan de ver el vaso medio lleno y opinan que, en parte, pudieron salir hechas del primer año por contar con una estructura chica –solo son ellas dos. “Muchas veces el crecimiento es detrimental del emprendimiento. Porque crecés de manera desordenada, vertiginosa, sin recursos para aguantarlo y tener una estructura baja en el primer año te da otra flexibilidad”, opina Cichero.

Al final, el balance de 2018 no fue tan catastrófico como pensaban. La clave, sostienen, estuvo en ponerse metas que fueran más allá de la facturación. Instalaron siete máquinas para cinco clientes, el objetivo que habían puesto en ese primer Excel. Además, ganaron el concurso de emprendedores de UdeSA gracias al que ahora comenzarán un proceso de incubación de seis meses, con un mentor, que las ayudará a postularse para recibir financiamiento. Y, no menor, validaron su relación como socias. “No me imagino haber hecho esto sola. No hubiese funcionado ni a nivel técnico ni emocional. Tenés que tener a alguien para charlar los miedos y festejar los logros”, opina Curi.

Ahora enfrentan 2019 con una proyección de instalar 14 máquinas nuevas (el doble que en el primer año), apuntan a entrar a universidades y salir a buscar empresas que tengan políticas de wellness corporativo que vayan más allá de la coyuntura. “Nos gana la convicción de que lo que estamos haciendo está bueno”, comentan.