Di Tella en los medios
El Cronista
19/09/18

Una startup llamada Argentina

Por Eugenia Iglesias,Ricardo Quesada y Adrés Engler

Andrés Hatum, profesor de Management & Organización de la Escuela de Negocios de la UTDT, fue consultado acerca de la capacidad de adaptación que adquieren los emprendedores argentinos gracias al contexto de continuas crisis que los rodean. "Como el país es poco previsible, el emprendedor tiene que ser mucho más ingenioso para triunfar", comentó.

En los últimos dos años, hitos como la sanción de la Ley de Apoyo al Capital Emprendedor, la vuelta al país de fondos de inversión y el apoyo del Gobierno a crear un ecosistema emprendedor que convierta al país en una startup nation, alimentaron el surgimiento de nuevos emprendimientos, de la mano de una gran cantidad de jóvenes, cada vez más jóvenes. Sus modelos a seguir son cada vez más locales: MercadoLibre, Globant, Despegar y OLX, los unicornios que el país aportó al mundo.
Una startup llamada Argentina
"Hace 20 años el foco no estaba sobre los emprendedores y en los últimos 10 o 15 hemos tenido situaciones muy adversas para la Argentina. A pesar de ello, se logró crear un ecosistema local entre organizaciones de la sociedad civil, universidades y organizaciones no gubernamentales (ONG) que impulsaron el nacimiento de emprendedores", afirma Silvia Torres Carbonell, directora del Centro de Emprendedorismo del IAE Business School.

Cabe destacar que, si bien en los primeros años de este siglo, la tasa de actividad emprendedora (TEA) marcó diferencia, la falta de reglas claras y la escasez de financiamiento impidieron un salto sustentable para la mayoría de los proyectos. Hoy, los aspectos financieros y comerciales y lograr cerrar los acuerdos de inversión, siguen siendo el principal desafío para el ecosistema local. Sin embargo, en los últimos dos años, se potenció el foco institucional. para reducir la brecha.    

Un pecado original

La mencionada Ley de Emprendedores es la piedar angular de tal objetivo. Su foco: desburocratizar y acelerar los tiempos de creación (ver aparte). Por su parte, al inversor se le permite descontar de ganancias el 75% del dinero invertido, siempre que el total no supere el 10% de la ganancia anual neta. Otra novedad es para quienes tengan proyectos en etapa inicial: podrán acceder a un fondo, que dispone de préstamos de honor dehasta $ 250.000, con plazo de devolución de seis años, un año de gracia y a tasa cero.

El intangible que los emprendedores locales siempre tienen a favor es la capacidad de adaptación y de resiliencia que hacen al ADN de una generación forjada entre crisis económicas. Andrés Hatum, profesor de Management & Organización de la Escuela de Negocios de la Universidad Torcuato Di Tella ( UTDT ), resalta: "Como el país es poco previsible, el emprendedor tiene que ser mucho más ingenioso para triunfar", comenta.

Desde hace relativamente poco tiempo sorprende que cada vez se ven más jóvenes de menos de 25 años al frente de proyectos bien estructurados que empiezan a jugar fuerte en el mercado. De hecho, a las universidades se acercan cada vez más estudiantes que tienen en claro que su carrera no va por el mundo de las corporaciones, sino que quieren ser creadores de sus propias compañías. "Cuando empecé a dar clases en el MBA, el 98% de los alumnos buscaba perfeccionarse para seguir su carrera corporativa. Hoy, el 30% ingresa con el objetivo de adquirir las herramientas para empezar su propio emprendimiento", resalta Torres Carbonell. La directiva del IAE agrega como rasgo auspicioso de estos tiempos a la creciente cantidad de mujeres que se anima a emprender. Otra novedad es el foco en soluciones de medicina y biotecnología que llegó en los útlimos dos años.    

Próxima escala, el mundo 

"En la Argentina, los emprendedores siempre han tenido mucho talento técnico, buena ejecución en cuanto a tecnología, sitios web, aplicaciones, pero a veces eran un poco descuidados en los aspectos suaves", recuerda Francisco Solsona, regional & accelerator lead de Google Developers. Sin embargo, el escenario cambió. Hoy las fuentes consultada coinciden en que la conformación de equipos bien estructurados se convirtió en un activo del emprendedor local. "Tal vez ese modelo de negocios no es el mejor, tal vez tengan que conseguir clientes, pero ese equipo es autónomo, puede funcionar por sí mismo y puede mejorar su idea", resume Juan Manuel Menazzi, director del Centro de Emprendedores del Instituto Tecnológico de Buenos Aires (ITBA).

La mirada internacional es otra de las características de la nueva camada de emprendedores locales. "Nacen con mirada global. La tecnología está en todos lados y la mentalidad con la que se asume un proyecto es global, pero hay que usarla en el momento adecuado", dice y advierte Alejandro Scannapieco, Chief Financial Officer de Globant. "En otros países la curva lleva naturalmente a dar el salto al mercado global, acá todavía se complica. Pero la ambición está", agrega Federico Espinosa, director de la disivión Disruptive Growth en AB Inbev Latinoamerica y responsable de la aceleradora Eklos.

A modo de resumen y desde la Asociación de Emprendedores de la Argentina (ASEA), su presidente, Ezequiel Calcarami, concluye: "Soy muy positivo por todo lo que se está haciendo, pero me parece que todavía tenemos que seguir haciendo cosas para que realmente explotemos como país emprendedor. El emprendedorismo no es solamente un ecosistema de gente de capital con proyectos tecnológicos. Es mucho más amplio. Y ahí está la verdadera nación emprendedora".