Di Tella en los medios
La Razón
2/05/16

En la búsqueda de crear ilusiones con el tiempo y el espacio

Tres muestras en paralelo sobre la obra del artista argentino Jorge Macchi proponen un recorrido por los últimos 25 años de su carrera. En el Malba, en la Universidad Di Tella y en el Bellas Artes.

“Perspectiva”, una exposición del artista Jorge Macchi (nacido en Buenos Aires en 1963) que repasa sus 25 años de producción artística e incluye unas 60 obras en múltiples formatos -sobre papel, videos, pinturas, fotografías e instalaciones- se puede visitar en el Museo de Arte Latinoamericano de Buenos Aires (Malba) hasta el 23 de mayo (Figueroa Alcorta 3415, de jueves a lunes de 12 a 20, miércoles de 12 a 21). Esta exhibición se completa con otras dos muestras del mismo artista: una instalación en la Torcuato Di Tella y otra en el Museo de Bellas Artes (ver recuadro).
Luego de sus retrospectivas en Brasil, Bélgica y Francia, la de Malba es la primera exposición antológica de Macchi en el país y abarca sus trabajos desde principios de los 90 hasta la actualidad. Tiempo, espacio y movimiento son tres conceptos recurrentes en los trabajos de Macchi, obras que parten del azar, de lo anecdótico y de lo cotidiano y que juegan con la mirada.
El recorrido está organizado en diferentes núcleos temáticos e incluye sus cartografías, obras hechas de recortes periodísticos, instalaciones donde el tiempo se detiene y el efecto óptico quiebra la realidad, fantasmagorías pictóricas y videoinstalaciones en las que la música tiene un rol fundamental. En sus obras, Macchi busca sorprender, crear efectos de ilusión.
La instalación “Buenos Aires Tour”, realizada con la colaboración de la escritora María Negroni y el músico Edgardo Rudnitzky, propone una particular guía por Buenos Aires: los tres colocaron un vidrio sobre un mapa de la Ciudad y lo rompieron en pedazos; sobre las líneas del vidrio roto armaron una guía en distintos puntos, con fotografías, escritor y sonidos -desde las bocinas de los autos, hasta el cantar de un ave-, que trazan un recorrido alternativo y más poético.
“Música incidental” es una pieza sonora basada en una partitura de tres hojas de pentagrama, aparentemente vacías. Cuando uno se acerca, las delgadas líneas son en realidad recortes de periódicos de notas policiales, accidentes y asesinatos, que el artista convirtió en una composición para piano.
Una habitación en penumbras aloja a “El cuarto de las cantantes”, una instalación basada en el poema “Adiós” de Idea Vilariño, en coautoría con Edgardo Rudnitsky, en la que el texto va apareciendo y desapareciendo letra por letra.
De manera precavida, se realizó esta vez con alambre de acero la pieza “Reacción”, prima de aquella idéntica que se presentó en Fundación Proa en 2011 y que consistía en una valla de contención de vidrio soplado, que una escritora de visita rompió por accidente. Otras obras son “Still Song” (una habitación decorada únicamente con una bola de espejos en el techo y cientos de agujeros en las paredes, que dan la sensación de arrasamiento), “Caja de música” y la videoinstalación “XYZ” (que proyecta sobre la pared un típico reloj de las estaciones de tren suizas, pero en un rincón de la sala). El ilusionismo sigue, cuando el visitante se encuentra de salida con una serie de vinilos similares a los dibujos del test de Rorschach, pero que de cerca son líneas de textos sobre noticias policiales publicadas en el diario Crónica.

¿Una habitación arrasada? Es la sensación en una de las instalaciones en el Malba.

Macchi por triplicado Dos instalaciones hasta mitad de año “Perspectiva” se extiende más allá de las salas de Malba con dos grandes instalaciones: “Refracción”, que se exhibe en la Sala de Exposiciones de la Universidad Torcuato Di Tella hasta el 3 de junio (gratis, en Figueroa Alcorta 7350, foto superior), y “La noche de los museos”, un “site-specific” para el Museo Nacional de Bellas Artes (MNBA), que se presentará hasta el 31 de julio. En la intervención que Macchi ideó para la sala 27 del Bellas Artes, la irrupción de lo inesperado altera el orden habitual del Museo y convive con obras de Xul Solar y Emilio Pettoruti, entre otros (gratis, en Libertador 1473, foto inferior).