Di Tella en los medios
La Nación
3/10/15

Los nuevos paradigmas de aprendizaje

Por Andrés Hatum

Uno de los cambios más significativos que las nuevas generaciones están aportando a la educación y a las organizaciones es el hecho de que aprenden de un modo diferente. Esto plantea un verdadero desafío en términos de cómo enseñar y desarrollara esta generación para liberar el potencial de la fuerza laboral joven.

Cuando describe la forma en que aprende las generaciones más jóvenes, Tim Elmore usa el término EPIC: experiencia, participación, imagen y conexión. La experiencia es muy importante pára los jóvenes y por ende la enseñanza y la comunicación deberían evitar apoyarse sólo en clases magistrales; es decir deberían ser más interactivas. La participación también es importante para esta generación, como suelen expresarlo los jóvenes millennials al subir lo que sienten y piensan en Internet Además las nuevas generaciones valoran la imagen, es decir están acostumbradas a usar símbolos verbales así como visuales para expresarse, y encuentran un imán en las imágenes. Por último, pero no menos importante, los jóvenes están conectados tanto social como tecnológicamente.

La nueva generación de estudiantes llega al campus con su iPod o iPhone metidos en un bolsillo y la tablet en el otro, enviando mensajes a algunos amigos mientras actualiza su estatus en Facebook y sube fotos. ¡Ah!,y cuando tienen tiempo libre pueden hallarse estudiando o trabajando en tareas para sus cursos.
¿Pero qué tipo de contexto han encontrado al llegar a la clase? Un aula anticuada llena de sillas que miran a un pizarrón en la que un profesor (que con suerte no es demasiado aburrido) escribe sin parar. Mientras tanto, los estudiantes están aburridísimos, se mandan mensajes entre sí y usan las computadoras, los teléfonos o las tablets para cosas que no están relacionadas con lo que está pasando en clase. Escuelas para A el hemisferio izquierdo del cerebro en un mundo del hemisferio derecho.

Las nuevas generaciones han crecido en un mundo digital y, si bien viven en el siglo XXI, su sistema educativo en muchas instancias atrasa por lo menos 100 años. El modelo de educación que todavía prevalece hoy fue diseñado para la era industrial. Gira en torno del profesor que da una clase igual para todos y en un solo sentido. Se espera que el alumno, trabajando solo, absorba el conocimiento presentado por el profesor.

¿Cómo pueden los profesores enseñar mejor a las nuevas generaciones? Reconocer la importancia de incluir la enseñanza de pares y las tutorías para tener éxito no sólo en términos de comprensión del material entre manos, sino también en términos de retener la información. Esto es importante para una generación que es buena para trabajos en colaboración y experienciales, y que está acostumbrada a que la tecnología se incorpore en su aprendizaje.

El problema hoy es que los educadores venden tradicionalmente la idea de que la mejor información proviene de los expertos, mientras que las nuevas generaciones de estudiantes se apoyan en las redes sociales para obtener datos, compartir preocupaciones y ser persuadidos por sus pares.

El hecho de que la forma en que aprende la gente haya evolucionado de una metodología centrada en el docente, igual para todos, hacia una centrada en el alumno, más personalizada, es relevante para las universidades que quieran crear programas efectivos de aprendizaje y desarrollo. La instrucción ya es pasado, lo que está vigente es la mentoría y el descubrimiento. El aprendizaje individualista tiene que dar paso al colaborativo.

Lo expuesto se focaliza más en la pedagogía que en la tecnología. El gran cambio de las universidades y los docentes tiene que ser pedagógico, y la tecnología acompaña ese proceso.


(*) Profesor de la Escuela de Negocios de la Torcuato Di Tella