Di Tella en los medios
La Nación
27/03/15

La arquitectura latina se alza en el MoMA

Es  una gran noticia para la arquitectura continental, que ha dado ejemplos superlativos en las obras de Oscar Niemeyer, Clorindo Testa, Amancio Williams, Paulo Mendes da Rocha y Lucio Costa, entre tantos otros, saber que a partir del domingo y hasta el 19 de julio el MoMA de Nueva York consagrará las salas del sexto piso a una fenomenal muestra de lo construido entre 1955 y 1980.

Latinoamérica en Construcción se llama esta selección de trabajos que resulta también un indicador clave del lugar que la arquitectura ocupa en la agenda de los museos contemporáneos. Basta saber que dos años atrás el propio MoMA montó una gran retrospectiva de Le Corbusier, coronada por un éxito de público sin precedente y un éxito de ventas del imperdible catálogo que acompañó la exhibición.

Son los museos también un laboratorio de pruebas para el desarrollo de proyectos audaces firmados por los grandes arquitectos del siglo XX, como sucedió con Frank Gehry (Guggenheim de Bilbao, Fundación Louis Vuitton) o con Renzo Piano, quien ganó fama mundial por el proyecto del Pompidou de París y está a punto de cortar la cinta inaugural del nuevo Whitney de Nueva York, en la zona del highline de Manhattan.

En este contexto, es muy relevante el interés de los museos del Primer Mundo por el arte latinoamericano, visible en la voluntad de acrecentar sus colecciones con obras de nuestros artistas. En 1955, el MoMA inauguró la recordada muestra Arquitectura de Latinoamérica desde 1945, con lo mejor de lo edificado en ese momento liminar de nuestra historia en Chile, Uruguay, Brasil, la Argentina, Perú, Colombia, Venezuela, México, República Dominicana y Puerto Rico.

En esta oportunidad el curador jefe del MoMA, Barry Bergdoll, y Jorge Francisco Liernur, por años decano de la Facultad de Arquitectura de la Universidad Torcuato Di Tella, sumaron esfuerzos y recursos para reunir más de 500 trabajos originales, que nunca habían sido exhibidos, incluso en los países de origen.

A mediados del siglo XX, ciudades como Buenos Aires, San Pablo, La Habana y Montevideo experimentaron una transformación propia de la modernidad y de nuevos modelos estéticos y constructivos, para convertirse en bulliciosas y expansivas metrópolis.

En los tempranos sesenta, se construyeron edificios icónicos como el ex Banco de Londres (hoy Hipotecario) de Buenos Aires, firmado por Clorindo Testa, considerado obra maestra del período brutalista. Un especial reconocimiento en esta oportunidad para el arquitecto Emilio Ambasz, cuya contribución fue clave para la realización de esta muestra; fue también él quien donó a la ciudad de Buenos Aires el proyecto de ampliación del Museo de Arte Moderno de Buenos Aires.

INSTAGRAM VA AL MUSEO

En paralelo con el montaje de esta muestra, el MoMA lanzó el Proyecto Instagram con el hashtag#ArquiMoMA, que estará en acción mientras dure la muestra. Es una invitación abierta a los usuarios de esa red social para compartir sus fotos de edificios emblemáticos de la arquitectura continental. Una selección de esas imágenes será colgada en las galerías del MoMA. Entre otras locaciones latinoamericanas recomendadas para fotografiar se cuentan el citado Banco de Londres; la Biblioteca Nacional de Buenos Aires; el Museo de Arte Moderno de Río de Janeiro; la Cooperativa Eléctrica de Chillán, en Chile; la heladería Coppelia, en La Habana; el Mercado Libertad, en Guadalajara, y el conjunto habitacional del Boulevard Artigas, en Montevideo.

Por Alicia de Arteaga