En los medios

Urbana Play
27/02/25

Camila Perochena: “A lo largo de la historia argentina, tuvimos enormes dificultades para garantizar la independencia de la Corte Suprema”

La profesora de la Licenciatura en Historia y directora de la Maestría en Periodismo fue entrevistada en Urbana Play sobre la independencia de la Corte Suprema en la historia argentina.

Por María O'Donnell

Camila Perochena, profesora de la Licenciatura en Historia y directora de la Maestría en Periodismo, fue entrevistada por María O’Donnell en el programa “De acá en más”, de Urbana Play, sobre la historia de la independencia de la Corte Suprema argentina. 

“A lo largo de la historia argentina, tuvimos enormes dificultades para garantizar la independencia de la Corte Suprema. Entre 1946 y la actualidad, Argentina tuvo ocho cambios masivos de jueces de la Corte Suprema. Si miramos Brasil, tuvo uno y fue en dictadura. Eso ya te muestra que nosotros tenemos una historia mucho más turbulenta en relación a la independencia de la Corte Suprema en comparación a otros países latinoamericanos, para compararnos con casos similares. Esto fue así en distintos momentos. Esto por supuesto no exculpa al Gobierno, lo que está haciendo es algo excepcional en el contexto de la transición de la democracia, porque la mayoría de las manipulaciones de la Corte Suprema se dieron entre 1946 y 1983, porque tuvimos muchos cambios de regímenes políticos”, explicó la profesora. 

“Después de la transición democrática, hacer esto tiene un costo. Menem fue criticado, tenía un costo político. Después se hace más difícil. La situación actual nos está mostrando algo distinto a nivel global, muchos politólogos trabajan estos temas, y muestran que las democracias, en las últimas décadas, se erosionan desde adentro. No tenemos golpes de estado a la vieja escuela del siglo XX, pero lo que tenemos son erosiones graduales a la democracia desde adentro, con intentos de concentrar el poder de forma autoritaria por vías legales o estirando mucho el margen de la ley. Una de las formas de erosionar la democracia es cooptando la justicia. Cooptando aquellos que te pueden jugar en contra en el momento en que vos quieras llevar a cabo tus agendas públicas”, sostuvo Perochena. 

“Es un problemón en términos de liberalismo. La Corte Suprema es una institución a la que se llama “contra mayoritaria”, haciendo referencia a que al Poder Judicial no lo elige nadie, no tiene la legitimidad electoral. El comunicado de la Presidencia dice algo así como que hay que aceptar todo lo que dice el Presidente, como si la única legitimidad posible sea la que te dan las elecciones, la soberanía popular. El Poder Judicial, y la Corte Suprema, surgen en el nacimiento de la democracia liberal o del liberalismo político, con la Constitución norteamericana de 1787, y nace como una institución para evitar la tiranía de la mayoría, como una institución contramayoritaria, no puede estar atada a la soberanía popular, porque lo que tiene que hacer es controlar los excesos que puedan tener los poderes mayoritarios, aquellos que fueron electos popularmente”, expresó la profesora.