En los medios

Crece la canasta básica: los números de pobreza que generan preocupación y prenden las alertas
Martín González Rozada, codirector de la Maestría en Econometría, analizó la evolución de la pobreza durante 2022.
Las subas persistentes de las canastas básicas llevan a los especialistas a proyectar que los niveles de pobreza volvieron a niveles en torno al 40%, lo que implicaría una suba de más de 3 puntos desde el 36,5 por ciento que informó el Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec) para el primer semestre de 2022.
La inflación de enero, del 6%, pero sobre todo la evolución de las canastas básicas de pobreza y alimentos (7,2% cada una) presiona sobre los sectores más vulnerables de la población e incluso crece la cantidad de trabajadores asalariados del sector formal que no reúne ingresos suficientes para cubrir esos consumos mínimos. Según informó el Indec, la canasta básica total (con la que se mide la pobreza) trepó 108% en doce meses y la canasta alimentaria (con la que se fija la línea de indigencia) trepó 109,8 por ciento interanual.

La tasa de pobreza volvió a superar el 40% en enero, según Martín González-Rozada, de UTDT.
"La Canasta Básica Total aumentó más de 100% interanual en diciembre y los ingresos totales familiares, por los datos que tenemos de empleados registrados aumentaron 93%. Los ingresos de los trabajadores informales crecieron menos", dijo González-Rozada. La creación de trabajo, añadió, se concentra "en el empleo informal y los monotributistas, que, en general, son los que menos ingresos tienen, por lo que crecen los trabajos con menores salarios".
Leopoldo Tornarolli, investigador del Centro de Estudios Distributivos, Sociales y Laborales (Cedlas) de la UNLP, estimó que la tasa de pobreza aumenta tanto entre asalariados registrados como no registrados. "La tasa de pobreza entre los asalariados informales (44.8%) casi que triplica la tasa de pobreza entre los asalariados formales (16%)", tuiteó, en base a los datos oficiales hasta el tercer trimestre de 2022.

El 16% de los asalariados formales está debajo de la línea de pobreza, según Tornarolli (Cedlas).
La pobreza entre asalariados formales se ubicaba debajo del 10% a fines de 2017, antes de la corrida cambiaria del año siguiente. La de trabajadores informales era algo inferior al 30%. Con la pandemia, hacia fines de 2020, el 18% de los asalariados formales y la mitad de los no registrados estaban debajo de la línea de pobreza. Luego comenzó una recuperación de los ingresos que se frenó en septiembre de 2022.
EL CAMBIO DE TENDENCIA
"Entre julio de 2021 y septiembre de 2022, hubo 14 meses en los que la inflación interanual dio por encima de la variación de las canastas. Como los salarios formales se negocian en base al IPC, miraban una referencia mayor a la de las canastas con las que se mide la pobreza. Entonces, aunque no le ganaran a la inflación, igual impactaba para una baja en la pobreza", explicó Tornarolli. "Pero eso desapareció y las canastas suben por encima del IPC desde septiembre. En enero, el IPC interanual quedó 10 puntos por debajo que la CBA y la CBT. Entonces, si hoy negociaran con el IPC, aun así, perderían contra las canastas y la pobreza subiría", agregó.
La pérdida del poder adquisitivo del salario es generalizada. Según datos de Luis Campos, coordinador del Observatorio de la CTA Autónoma, el salario real de los trabajadores registrados del sector privado se encontraba, en diciembre de 2022, 15 puntos por debajo del poder adquisitivo de diciembre de 2016. El salario real del sector público cayó casi 18 puntos. Y el ingreso de los trabajadores informales se desplomó casi 40 puntos en seis años, de acuerdo a los números del Indec. Desde diciembre de 2019, el salario registrado privado gana 1% promedio; el salario público le empata a los precios y el ingreso informal pierde 19,3 por ciento.