En los medios

La Nación
17/10/21

Efectos de la pandemia. El desafío ampliado de buscar y retener talentos y las modificaciones en la vida de las ciudades

Andrés Hatum, profesor del MBA y Executive MBA, fue consultado sobre el impacto de la pandemia en el teletrabajo.


La irrupción de la pandemia en la vida de las personas dejó atrás cambios que alteraron la forma de conseguir talentos desde las empresas y de transitar la vida cotidiana en las ciudades. 

En un mar de propuestas innovadoras que recorren el mundo mientras se sale de la crisis sanitaria, la fundadora y directora de Sociopúblico, Sonia Jalfin, resumió, en el encuentro sobre empresas en acción organizado por la nación, una serie de inventos y modificaciones en las ciudades que se van disponiendo para facilitar y agilizar la vida de la manera más ecológica y eficiente posible. Por ejemplo, la popularización de los bares en las veredas -o “parklets”- como lugar de encuentro, los sensores para determinar dónde hay lugar para estacionar, los sistemas de señalética en los que a partir de iluminación de diferentes colores se indica para qué se puede usar el espacio en el momento (estacionamiento, lugar de carga y descarga, reuniones sociales).

También hizo alusión al impacto de la pandemia en las pantallas, a las que muchas personas buscan esquivar, o la mutación de los que supieron ser eventos presenciales multitudinarios posibles reuniones con menor tolerancia a la cercanía por parte de quienes se criaron durante la pandemia. “Cuando empezamos a hacer otro uso de algo que antes estaba estático se abren nuevas posibilidades y eso nos permite innovar”, concluyó. 

Otro aspecto en el que incidió la pandemia es el desafío de las empresas para retener talentos. En un escenario en el cual se aceleran los procesos digitales y surge la necesidad de nuevas competencias, las compañías se preocupan por la rotación del personal. 

Para Andrés Hatum, PhD de la Universidad de Warwick UK profesor de la Escuela de Negocios de la Universidad Torcuato Di Tella, la cultura del teletrabajo fue una de las joyas que trajo consigo la crisis sanitaria, contexto en el que “el poder pasó a la gente, las empresas luchan para que sus empleados vuelvan a la oficina pero en el que hay que trabajar en qué le viene bien a las personas”, señaló.

Y consideró que para retener talento, las compañías tienen que contratar a sus empleados por su potencial y no por su experiencia. Destacó que el talento no se debería buscar solo en las universidades sino también fuera de ellas, donde están los autodidactas. “Entender qué quieren los empleados. Eso te va a hablar del liderazgo que hará falta; [los líderes] tienen que ser empáticos, confiables”, especificó, reforzando la idea con el dato de que ocho de cada diez empleados renuncian por un mal jefe.

“Si hay mucha rotación, hay que entender por qué pasa, tal vez hay un jefe que es una semilla podrida.
Ahora bien, cuando no hay rotación también tenés un problema. La gente que quiere morir en el escritorio es bloqueadora de carrera para muchos que vienen, tiene que haber un equilibrio sano”, finalizó.


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