En los medios

RED/ACCIÓN
3/08/21

¿Por qué hay personas que rechazan el lenguaje inclusivo?

Karina Galperin, directora de la Maestría en Periodismo UTDT/La Nación y profesora de las Licenciaturas en Historia y Ciencias Sociales, participó del podcast FOCO, donde opinó sobre el lenguaje inclusivo.

Por Delfina Campos


Karina Galperín, directora de la Maestría en Periodismo UTDT/La Nación y profesora de las Licenciaturas en Historia y Ciencias Sociales, participó del podcast FOCO, donde habló del lenguaje inclusivo. "La RAE lo que debería hacer es decir que el esquema gramatical de género es el siguiente pero que, sin embargo, notan que hay cierta incomodidad con esa norma y que ciertos grupos están haciendo reemplazos del masculino genérico, y que hasta tanto eso no sea un uso mayoritario en la lengua, la norma seguirá siendo la que es", señaló.

Según Galperín, falta mucho para que la RAE incorpore el inclusivo y falta, principalmente, un uso mayoritario "que siempre es subjetivo". Explicó que está en contra de las imposiciones en el lenguaje: "La mejor imposición es la del uso creciente". "La mejor "imposición" de los nuevos usos es precisamente el uso, y que la gente use formas que le parecen más cómodas y que respetan a otros, y si las instituciones acompañan como muchas han venido acompañando con reglamentación que permita [el lenguaje inclusivo], me parece bien", explicó.

Respecto a la pregunta de si la lengua española es más sexista que otras que no presentan problemas a la hora de nombrar el género, Galperín sostuvo que "las lenguas no son sexistas, sino que tienen origen y se desarrollan dentro de sociedades que son patriarcales". "De alguna manera eso ha quedado codificado en la lengua y, sobretodo, en la aceptación de esos usos que ha hecho que esa configuración gramatical no cambiara a lo largo de tanto siglos", dijo, y agregó: "También hay un costado práctico: en todas esas sociedades los grupos más visibles de la vía pública eran exclusiva o mayormente masculinos, de modo que el masculino genérico designaba grupos que no debían ser solo masculinos, pero que en la práctica lo eran". "Ha cambiado la configuración de esos grupos y ahora cuando los llamamos de la manera que los llamamos toda la vida responden un poco peor al sentido común, como en grupos donde la mitad o más son mujeres. Hay un problema práctico adicional al ideológico", analizó.

"Hoy lo que nos sucede es que estamos buscando una forma gramatical que no existe en la lengua para un nuevo tipo de realidad", dijo. Respecto a la resistencia al lenguaje inclusivo, Galperín identifica dos tipos: "Hay un grupo que se resiste porque se resiste a todas las ideas de cómo debe estar configurada la sociedad que vienen atrás del lenguaje inclusivo, sobre el lugar de las mujeres y los géneros no binarios, es una resistencia ideológica; pero también hay un montón de gente que se resiste porque cualquier cambio en la lengua genera resistencia". 

La opinión completa, acá: