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La Nación
26/07/20

Comercio y tecnología: para la Argentina, un difícil equilibrio

Ignacio Mamone, profesor del Dpto. de Ciencia Política y Estudios Internacionales, fue consultado sobre la posición comercial de la Argentina en medio de las tensiones entre China y Estados Unidos.

Por Paula Markous


El presidente Trump y Xi

Como un bote en medio de dos buques acorazados, la Argentina se mueve con cautela entre China y Estados Unidos. Pero a medida que la tensión crece entre las dos superpotencias y ya se habla de una Guerra Fría , el país deberá redoblar su inteligencia diplomática para salir a flote de esta puja que afecta a todo el mundo.

Los expertos consultados por LA NACION coinciden en un punto. Por ahora, la Argentina, como casi todos los países, no puede elegir un bando.China, que en abril pasado desplazó a Brasil como el principal socio comercial de la Argentina, es vital para el país en materia de comercio, inversiones y finanzas. Con Estados Unidos, hay una dependencia por el fuerte endeudamiento en dólares y por el crucial apoyo de Washington en el FMI.

El interrogante es si esa posibilidad de mantenerse neutral se complicará en medio de una disputa que se prevé más intensa y compleja.

La rivalidad entre China y Estados Unidos -que también son grandes socios- toca la economía, la geopolítica y el desarrollo tecnológico. ¿Cómo queda parada la Argentina en este escenario?

"Por el lado comercial, la Argentina no pudo aprovechar la caída del comercio bilateral entre China y Estados Unidos para exportarles más durante su guerra comercial en 2018 y 2019. Sin embargo, ahora durante la pandemia, la Argentina sí aumentó sus flujos comerciales con China, que se convirtió en el primer destino de nuestras exportaciones", explicó a LA NACION Ignacio Mamone, politólogo residente en Washington y profesor visitante de Política Exterior de la Universidad Di Tella.

En el plano de defensa, la Argentina es claramente un jugador menor, pero "hay un tema que Estados Unidos ve con malos ojos y es la estación espacial china que se construyó en Neuquén durante el gobierno de Cristina Kirchner", dijo a LA NACION Pablo Kornblum, doctor en Relaciones Internacionales de la Universidad del Salvador.

"La base, que estaría destinada a investigaciones científicas de China en el espacio, depende del Ejército Popular y puede ser utilizada con fines militares", añadió.

Incomodidad

El otro punto de fricción -y quizás el más incómodo para la Argentina- es la batalla tecnológica . China está enfrentada con Estados Unidos por el desarrollo de la tecnología de comunicación 5G. El presidente norteamericano, Donald Trump, acusa a la empresa china Huawei, uno de los líderes del sector, de estar aliada con Pekín y usar las redes inalámbricas para hacer espionaje en todo el mundo.

Aunque la Argentina está atrasada en la implementación del 5G, en el futuro deberá ver qué postura adopta. A principios de este mes, autoridades de la Cancillería se reunieron con Steven Chen Shiqing, CEO de Huawei Argentina, lo cual demuestra que siguen en conversaciones. Cualquier decisión que tome [el Gobierno] tendrá consecuencias importantes en la relación diplomática con Estados Unidos", señaló Mamone.

En este contexto de rivalidad, uno de los aspectos más inquietantes es el endurecimiento diplomático de ambos bandos, no solo de Trump y sus halcones, que ya hablan de "mundo libre" versus "nueva tiranía".

"El endurecimiento de la diplomacia china lo vemos en las acciones en el Mar de la China Meridional, en sus roces con la India, en la nueva ley [de seguridad] en Hong Kong. Incluso, en el gobierno de Xi Jinping están los diplomáticos conocidos como los wolf warriors , apodados así en referencia a una famosa saga de películas chinas, protagonizadas por un grupo comando que mata norteamericanos", explicó a LA NACION Sergio Cesarín, profesor de la Untref e investigador del Conicet.

Australia ya sufrió el primer golpe de China. En junio pasado, Pekín suspendió la importación de carne vacuna del país oceánico por "problemas técnicos", después de que el gobierno solicitara una investigación sobre el origen del coronavirus. A mediados de marzo, Brasil estuvo cerca de ser castigado luego de que el diputado Eduardo Bolsonaro, hijo del presidente Jair Bolsonaro, hablara del "virus chino". Solo quedó en un reto por Twitter . Las exportaciones brasileñas a China aumentaron 13,1% en los primeros cinco meses del año en comparación con el mismo período de 2019.

Es poco probable que China ponga a la Argentina entre la espada y la pared, estimó Mamone. Y aunque eso suceda, en opinión de Korblum, "[el presidente Alberto] Fernández tiene a China en el hombro izquierdo y a Estados Unidos, en el derecho, y necesita de los dos para salir de su propio berenjenal".


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