Camila Perochena, profesora invitada del Departamento de Ciencia Política y Estudios Internacionales, visitó el programa Odisea Argentina, por LN+, donde fue entrevistada por Carlos Pagni sobre el papel de la palabra en la política, tema con el que el presidente Alberto Fernández inició su discurso en la Asamblea Legislativa.

“El inicio del discurso de Fernández fue muy similar al de Menem en el inicio de las sesiones de 1990. Menem arranca diciendo que para ver cuánto coraje tiene un pueblo hay que ver cuánta verdad está dispuesto a soportar”, comparó la historiadora, y recordó que en aquella ocasión Menem afirmó que hablaría con la verdad. Agregó que la similitud entre ambos discursos podría deberse a que en la redacción de ambos se presume la mano de Gustavo Béliz. Otra idea en común entre ambos discursos es la de “reconciliar a los argentinos”, explicó Perochena.

Luego Pagni consultó a Perochena sobre los efectos que los discursos de Macri y Fernández podrían ejercer sobre la mentalidad de un militante radical. “El que apuntó a las tripas de los radicales fue el discurso de Fernández. No sólo por las menciones a Alfonsín, sino porque hay muchas menciones a la cuestión moral; la cuestión de la escuela de administradores públicos, retomando iniciativas que había pensado Alfonsín”, respondió.

Sin embargo, la profesora calificó al discurso de Fernández como “albertista” por lo “contradictorio y ambiguo”, e identificó esas inconsistencias en una metáfora de Max Weber sobre la ética de la convicción y la ética de la responsabilidad que empleó el presidente. “Pero Weber aclaró que esas dos éticas no pueden ir juntas”, distinguió, y agregó que en su discurso pareciera que Fernández cree que se pueden conciliar: “Es un optimismo voluntarista”.  

Luego Perochena se preguntó si el presidente estará dispuesto a renunciar a ciertos valores en nombre de una ética de la responsabilidad, o si más bien se va a aferrar a una ética de la convicción.

También dijo que en el discurso quedó manifiesta la concepción que Fernández tiene de la economía. “Hablaba de ‘los vivos que especulan’, o de ‘los bobos’ (que somos los que consumimos), o cuando citó al Papa hablando de una ‘economía con alma’: es una forma ‘moral’ de pensar la economía”, consideró.

Cambiando de tema, Pagni consultó a Perochena sobre la foto que circuló de Axel Kiciloff colgando en su despacho un retrato de Juan Manuel de Rosas. “La reivindicación de Rosas que hace Kicillof es una continuidad de la que hacía Cristina Kirchner. Y arrancó en la década de 1930 con los historiadores revisionistas para tratar de desterrar la imagen de Rosas como un tirano”, dijo.

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