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El Cronista
30/01/20

Guiños del Papa y apoyo en el FMI, metas de la gira europea de Alberto

Juan Negri, profesor del Dpto. de Ciencia Política y Estudios Internacionales, consideró que la estrategia del gobierno de cara a la negociación de la deuda es buscar apoyos por fuera de Washington. "Están planteando la necesidad de una política exterior desideologizada y pragmática, lo que incluye no quedar demasiado pegado a Estados Unidos", comentó al respecto.

Por Francisco Llorens


Luego de su primer viaje al exterior como presidente, a Israel, Alberto Fernández emprendió anoche su gira europea. Visitará cinco países en una semana y se reunirá con varios líderes políticos mundiales: Papa Francisco, Giuseppe Conté, Sergio Matarella, Angela Merkel, Pedro Sánchez y Emmanuel Macron.

¿Qué busca Fernández en el Viejo Continente? ¿Qué soluciones puede encontrar allá a los desafíos que tiene acá? El politólogo Julio Burdman consideró, en primer lugar, que lo fundamental del viaje serán "las reuniones con los mandatarios europeos, en las que Fernández les pedirá apoyo en el FMI para el proceso de renegociación de la deuda". En este sentido, el especialista analizó que algo cambió en la geopolítica tanto de la Unión Europea como de Estados Unidos respecto a los organismos internacionales.

"Hoy es más evidente que son los presidentes y los primeros ministros quienes influyen políticamente sobre los representantes de los países en los organismos", explicó.

Puertas adentro, Burdman sostuvo que la política doméstica está "suspendida" en este momento. El mayor componente local del viaje será, para el analista, la visita al Papa Francisco, en donde "tratará de demostrar que hay una diferencia respecto a la relación con el gobierno anterior". Igualmente, advirtió sobre un tema que puede atentar en este vínculo: las declaraciones de Fernández sobre el aborto.

El analista político y profesor de la UCA Ignacio Labaqui coincidió en que Fernández "probablemente busque apoyo internacional de cara a la relación con el FMI". Además, consideró que buscará montar una política exterior propia, "que difiere a la vez de la de Cristina Kirchner, sobre todo su segunda presidencia, y de Mauricio Macri, que tenía una relación más cercana con los Estados Unidos".

Sobre los encuentros, el analista consideró que es difícil que haya "compromisos concretos".

Además, explicó que será difícil que exista "algún perjuicio o beneficio de corto plazo para la política doméstica", a menos que existan serias diferencias de opinión de Fernández con sus interlocutores europeos.

Juan Negri, profesor de Estudios Internacionales de la UTDT, observó que tanto el presidente Fernández como el canciller Felipe Solá "están planteando la necesidad de una política exterior desideologizada y pragmática. Eso incluye no quedar demasiado pegado a Estados Unidos". De esta forma, esto lleva a que se busquen apoyos en relación a la cuestión de la deuda y el FMI "por fuera de Washington".

En el ida y vuelta de la relación, Negri sospecha que Estados Unidos tampoco desea un vínculo "tan cercano como con Macri". Si bien Argentina no es una prioridad para ese país, las diplomáticos estadounidenses ven al actual gobierno argentino "como una incógnita. Con el kirchnerismo se llevaban mal y apostaron por Macri. Ahora están en posición de esperar y ver qué pasa" con la actual administración.

Respecto al encuentro con el Papa cree que ahí los objetivos son otros y no están vinculados a lo que pueda suceder en el directorio del FMI, donde Francisco poco puede hacer. "Ahí sí hay una búsqueda de política interna", sostiene. Y agrega que "la foto con el Papa impacta en Argentina. Recordemos cómo se reflejaba la mala onda de Francisco con Macri".

Igualmente, Negri avisó que algunas cuestiones en política exterior "sí salen bien no suman tanto, pero si salen mal restan mucho", como los viajes. También agrega que estas cuestiones no siempre tiene un impacto directo con la política local. Y lo ejemplificó con un hecho que sucedió durante la presidencia de Macri, la cumbre del G20.

"Fue un éxito, vinieron los líderes.- pero eso reverberó muy poco en política interna". En definitiva, analiza que el viaje será un éxito "si se logra resolver el problema de la deuda. Pero es un juego a largo plazo".

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