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Ámbito Financiero
14/01/20

Dólar: anticipan brecha récord para febrero

Federico Furiase, profesor de la Maestría en Finanzas de la UTDT, opinó sobre la brecha entre las distintas cotizaciones del dólar. Remarcó que existen algunos elementos negativos que le pasarán factura a la brecha a partir de febrero: la caída de demanda estacional de dinero y el fuerte incremento del vencimiento de bonos en pesos.

Por Caetano Mohorade

La brecha cambiaria podría consolidarse por encima del 35% y alcanzar un pico durante febrero. Así lo estimaron diversos expertos, al analizar la fuerte emisión de pesos que se viene registrando desde hace unas semanas, producto de la constante baja en las tasas de interés que viene impulsando el Banco Central, y por las diversas compras de divisas en el mercado de cambios. Además, no descartaron que las tasas verifiquen cierto rebote, en el caso de que el spread alcance niveles sumamente elevados.

Federico Furiase, director de la consultora Eco Go, destacó que la emisión se está dando como consecuencia de “la compra de dólares por parte del Banco Central provenientes del superávit comercial y por la asistencia de la autoridad monetaria al Tesoro; también responde al desarme de Leliq, ante la baja de la tasa”, ya que hoy, en términos reales, se ubica en terreno negativo. Con respecto a la brecha cambiaria, estimó que “el spread dependerá del tiempo de la negociación de la deuda en dólares y del éxito del Tesoro en la reconstrucción de la curva de deuda en pesos”, dado que el oficialismo necesita reconstruir la confianza, para que aumente la demanda por los activos en moneda local.

La brecha cambiaria es una consecuencia natural que se da en contextos de restricciones a la compra de dólares en el MULC. Los agentes, dado el cupo de u$s 200 mensuales para adquirir moneda extranjera por la vía oficial, se terminan volcando por otras alternativas, como son el mercado paralelo (blue), o la plaza bursátil (“contado con liqui” y dólar MEP). Esto impacta sobre el precio de las cotizaciones, generando así una diferencia con el tipo de cambio oficial. Hoy en día, la brecha entre el blue y el oficial asciende al 21,51%. En cambio, en el caso del “contado con liqui” y del dólar Bolsa, al 34,9% y 33,3%, respectivamente, con el mayorista.

Furiase remarcó que existen algunos elementos negativos que le pasarán factura a la brecha a partir de febrero: la caída de demanda estacional de dinero y el fuerte incremento del vencimiento de bonos en pesos. Además, si los bonos en pesos, que en el último mes han registrado fuertes ganancias, observan una toma de ganancias, esto también podría impactar sobre el spread. A favor, sostuvo que “el Gobierno podría convalidar cierto desplazamiento del tipo de cambio oficial, lo que sería una buena señal”. Y consideró que, “si la brecha comienza a escalar, habrá un problema en las expectativas de inflación, que comenzarán a formarse a partir del dólar paralelo. Pero además, también habrá un problema en la balanza comercial, que terminaría repercutiendo negativamente sobre el superávit”.

Por su parte, la Sociedad de Bolsa Bull Market Brokers (BMB), destacó que en enero, el trigo aportará casi u$s600 millones, a lo que deben sumarse el maíz, la harina de soja y los cargueros de aceite, que totalizarán un total de exportaciones de u$s1.600 millones, “que puede llegar a ser más, si se tiene en cuenta pagos diferidos”. De acuerdo con BMB, toda esta operatoria implicará una emisión de $96.000 millones. “Hoy, dada la particularidad del cepo, es más importante para el mercado de cambios la emisión de pesos que cualquier otra estrategia con la tasa de forma directa, porque los stocks en moneda local siguen aumentando al tipo de cambio oficial con un stock de Leliq y REPO de $1,4 billones”, estimó. Y manifestó que las tasas podrían comenzar a rebotar cuando “la brecha se acerque peligrosamente al 40% en las próximas cinco semanas”.

BMB anticipó que el aumento del spread “obligará al Gobierno actuar de manera informal y no pública en el mercado de dólar Financiero, mediante la venta de títulos públicos, especialmente Bonar 2024 en la paridad en pesos, para contener la suba”. Entre los agentes gubernamentales que deberán intervenir, no sólo se encuentran el Banco Central y el Tesoro, sino que es probable que también participe el FGS de la ANSES, con el fin de mantener la volatilidad acotada en el mercado. Según datos de BMB, el organismo tiene el 15% de toda la emisión de Bonar 2024, unos 1.200 millones de nominales, a un valor residual de u$s990 millones y de mercado de u$s530 millones.