En los medios

Radio Con Vos FM 89.9
7/12/19

Ezequiel Spector analiza los dilemas morales de la maternidad subrogada

A partir de dos casos que llegaron a los tribunales de Estados Unidos en 1988 y en Argentina en 2016, el profesor investigador de la Escuela de Derecho debatió con el equipo de “Spoilers” la maternidad subrogada. También fue consultado acerca de los dilemas éticos y jurídicos en torno a la deserción de cuatro diputados de Cambiemos y la formación de un nuevo bloque.

Ezequiel Spector, profesor investigador de la Escuela de Derecho, dedicó su columna en “Spoilers” (Radio Con Vos) a los dilemas éticos detrás de la maternidad subrogada.

A partir de dos casos ejemplo que llegaron a los tribunales de Estados Unidos en 1988 y en Argentina en 2016, Spector debatió con el equipo de “Spoilers” el alquiler de vientres. “No está regulado por el Derecho, lo que da a muchas interpretaciones”, sostuvo.

El abogado señaló que “en Estados Unidos se reguló que era inválido porque había dinero de por medio, lo que funcionaba como una compra y venta de bebés y eso violaría la dignidad del bebé”, pero por otro lado “en Argentina no había dinero de por medio, sino que era un intercambio altruista y decidieron que esos intercambios eran constitucionales”.


Según Spector, “se complica cuando esta práctica está comercializada. Si hay dinero de por medio hay personas que se pueden enriquecer y puede llevar a la explotación”. 

Finalmente, fue consultado por el equipo de “Spoilers” acerca de los dilemas éticos y jurídicos alrededor de la deserción de los cuatro diputados de Cambiemos del bloque de la Cámara Baja y formaron un nuevo bloque. “Desde el punto de vista jurídico, está amparado por el caso Borocotó 2005. Dicho caso dictaminó que los partidos políticos postulan candidatos, pero que lo que se eligen son personas y no partidos y que pueden hacer lo que quieran. Éticamente ese fallo está alejado de la realidad”, sostuvo Spector.

“Uno no votó a estas personas por su expertise en técnica legislativa, uno votó a un partido. Cambiar de bando es una falta de respeto al electorado. Aunque jurídicamente no es ilegal, éticamente es deplorable”, concluyó.

Columna completa: