En los medios
12/07/18
En la primera mitad del año, Perú se impuso en Copa América Bursátil
Perú se ubica en primer lugar en la Copa América Bursátil (CAB), un índice de desempeño bursátil relativo del Centro de Investigación en Finanzas (CIF) de la Escuela de Negocios de la UTDT. El podio lo completan Colombia, con 9,8%, y México, con 5,3%.
El podio es para Perú, Colombia y México, con rendimientos propios de 13,3%, 9,8%, 5,3%, cada uno. En estos tres países se observa la mayor mejora en la valorización propia de sus empresas durante 2018, comparado con el resto de la región. En cambio, Argentina ocupa el último puesto: rindió 10,4% menos que su benchmark mundial.
La CAB es un índice de desempeño bursátil relativo del Centro de Investigación en Finanzas de la Escuela de Negociosde la Universidad Torcuato Di Tella que compara los rendimientos propios de los índices bursátiles nacionales de los principales países de América Latina. En este análisis, Argentina ocupa el último puesto, con un rendimiento propio de -10,4%”, es decir que Argentina rindió 10,4% menos que su benchmark mundial.
Según aclara el Centro de Investigación de Di Tella, el rendimiento propio es la diferencia entre el rendimiento total del índice nacional y el rendimiento de un índice mundial de referencia (o benchmark) específico para cada país. “Gana el torneo aquel país que tuvo el máximo rendimiento propio, le sigue el segundo y así sucesivamente”, subrayan. En tiempos considerados normales, el principal componente del rendimiento propio es el cambio en las expectativas de los inversores sucedido en el período. Los rendimientos son los cambios porcentuales en los valores durante cierto período, o sea, reflejan el cambio de estas expectativas en dicho lapso. La Copa América Bursátil aspira a computar fielmente los cambios en las expectativas de los inversores sobre un país, purgando los rendimientos accionarios del efecto de estas otras fuentes. Así es como en Perú, Colombia y México “se observa la mayor mejora en la valorización propia de sus empresas durante 2018, comparado con el resto de la región”.
Juan José Cruces, director del Centro de Investigación en Finanzas de la UTDT e Investigador a cargo de la CAB indicó que la Copa América Bursátil busca estimar los cambios en las expectativas de los inversores en el corto, mediano y largo plazo. “El índice argentino rindió 10,4% menos que su índice de referencia mundial en lo que va de 2018, a diferencia de lo ocurrido en 2017, cuando en todo el año rindió 35,6% más que este.
De esta manera, Argentina pasa de liderar la región en 2017 a terminar en la última posición en lo que va del 2018”, señala.
Por otro lado, Cruces añade que “a nivel regional, el retorno real promedio de los países analizados (Argentina, Brasil, Chile, Colombia, México y Perú) fue de - 3%, en comparación con el -5,6% para el promedio de sus índices mundiales de referencia. “A pesar de todo, la región ha tenido un desempeño promedio 2,6% superior al del resto del mundo”, remarca.
La CAB de un año es una medida del cambio en el valor propio de las empresas ocurrido desde el final del año anterior. Su principal componente es el cambio en las expectativas de los inversores ocurrido dentro del año. Valores positivos indican una mejora y valores negativos indican un empeoramiento de las expectativas en ese lapso. En esa línea, advierten que “sus resultados no deben interpretarse como el valor absoluto de las expectativas ni como un estimador del desempeño económico presente de los países analizados”.
Mirá la nota en la edición impresa:
La CAB es un índice de desempeño bursátil relativo del Centro de Investigación en Finanzas de la Escuela de Negociosde la Universidad Torcuato Di Tella que compara los rendimientos propios de los índices bursátiles nacionales de los principales países de América Latina. En este análisis, Argentina ocupa el último puesto, con un rendimiento propio de -10,4%”, es decir que Argentina rindió 10,4% menos que su benchmark mundial.
Según aclara el Centro de Investigación de Di Tella, el rendimiento propio es la diferencia entre el rendimiento total del índice nacional y el rendimiento de un índice mundial de referencia (o benchmark) específico para cada país. “Gana el torneo aquel país que tuvo el máximo rendimiento propio, le sigue el segundo y así sucesivamente”, subrayan. En tiempos considerados normales, el principal componente del rendimiento propio es el cambio en las expectativas de los inversores sucedido en el período. Los rendimientos son los cambios porcentuales en los valores durante cierto período, o sea, reflejan el cambio de estas expectativas en dicho lapso. La Copa América Bursátil aspira a computar fielmente los cambios en las expectativas de los inversores sobre un país, purgando los rendimientos accionarios del efecto de estas otras fuentes. Así es como en Perú, Colombia y México “se observa la mayor mejora en la valorización propia de sus empresas durante 2018, comparado con el resto de la región”.
Juan José Cruces, director del Centro de Investigación en Finanzas de la UTDT e Investigador a cargo de la CAB indicó que la Copa América Bursátil busca estimar los cambios en las expectativas de los inversores en el corto, mediano y largo plazo. “El índice argentino rindió 10,4% menos que su índice de referencia mundial en lo que va de 2018, a diferencia de lo ocurrido en 2017, cuando en todo el año rindió 35,6% más que este.
De esta manera, Argentina pasa de liderar la región en 2017 a terminar en la última posición en lo que va del 2018”, señala.
Por otro lado, Cruces añade que “a nivel regional, el retorno real promedio de los países analizados (Argentina, Brasil, Chile, Colombia, México y Perú) fue de - 3%, en comparación con el -5,6% para el promedio de sus índices mundiales de referencia. “A pesar de todo, la región ha tenido un desempeño promedio 2,6% superior al del resto del mundo”, remarca.
La CAB de un año es una medida del cambio en el valor propio de las empresas ocurrido desde el final del año anterior. Su principal componente es el cambio en las expectativas de los inversores ocurrido dentro del año. Valores positivos indican una mejora y valores negativos indican un empeoramiento de las expectativas en ese lapso. En esa línea, advierten que “sus resultados no deben interpretarse como el valor absoluto de las expectativas ni como un estimador del desempeño económico presente de los países analizados”.
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