Para los MBA, la crisis es una oportunidad
<P><SPAN class=volanta>Posgrados / Nuevas opciones</SPAN></P><P>Por Graciela Lehmann </P>
"Vivimos un momento histórico", repiten una y otra vez los medios de comunicación, mientras bombardean con noticias que anuncian la caída de los mercados, las frenéticas oscilaciones de las bolsas internacionales y la dramática quiebra de colosales empresas en el contexto de un sistema financiero que se debilita inexorablemente. En un escenario incierto, la palabra "crisis" es probablemente una de las más pronunciadas por estos días y la preocupación por superarla se contagia.
Pero en momentos así, "sólo la imaginación es más importante que el conocimiento", decía Albert Einstein, y ¿qué mejor manera de desarrollar ambos aspectos que a través de la formación? Las escuelas de negocios de las universidades lo saben y se preparan para recibir a más profesionales dispuestos a invertir sus ahorros en educación. Por otra parte, las aulas pueden ser territorios ideales para vivir el mundo real de los negocios como una experiencia transformadora. A esta situación se suma el hecho de que las ofertas de MBA en nuestro país son cada vez más variadas y la calidad de los programas ofrecidos se equipara a la de los principales centros internacionales de estudios.
LA NACION dialogó con especialistas y académicos para conocer cuáles son las principales ofertas y por qué estudiar un MBA sigue siendo una buena forma de inversión, de cara a la crisis.
"Desarrollar el espíritu emprendedor y alcanzar el máximo potencial profesional" son premisas fundamentales del IAE, según señala Andrea Fernández Boll, directora ejecutiva del MBA, y agrega que "los profesionales egresan altamente ejercitados en el pensamiento estratégico y en la toma de decisiones.
"Con un cuerpo docente integrado por más de 60 profesionales con doctorados en prestigiosas instituciones internacionales, un método de estudio basado en casos y una notable trayectoria de intercambios de alumnos y profesores, el IAE ( www.iae.edu.ar ) cumple 30 años de experiencia. Durante esas décadas, ha transitado los diversos cimbronazos políticos y económicos de la realidad local, y como conclusión de esa experiencia: la formación siempre cotiza.
"Es una tendencia: muchos jóvenes profesionales aprovechan para usar sus ahorros para capacitarse y así estar mejor preparados una vez pasado el golpe económico", señala Fernández Boll, que anticipa una mayor cantidad de aspirantes del sector financiero para el año próximo.
Listos para competirEl rector de la UADE, Jorge del Aguila, coincide en que en la Argentina, como en otros lugares del mundo, en situaciones de crisis aumenta la demanda de los programas en MBA, porque "en épocas de gran desempleo, una de las formas de distinguirse es mejorar las credenciales y estar preparado para competir más cuando las circunstancias cambien".
UADE Business School ( www.edde.edu.ar ) "ofrece un ámbito de discusión en temas de interés para el empresario argentino y permite adquirir una visión integral, desarrollando la toma de decisiones y mejorando el desempeño profesional".
Para Del Aguila, un MBA es siempre una opción atractiva porque satisface la necesidad de ordenar el pensamiento y la forma de actuar de los ejecutivos. "Muchos profesionales resuelven los problemas por intuición -dice el académico- y si bien los jóvenes tienen otra disciplina, la propia del pensamiento universitario, muchas veces carecen de la conexión entre la teoría y la realidad, de modo que este tipo de posgrados les permite ordenar los temas por importancia, conectar el material analítico con la realidad y obtener una serie de soluciones y opciones, que terminan por mejorar su desempeño."
Según los especialistas, un buen equilibrio entre la práctica y la teoría es una característica fundamental de estos programas y un rasgo que resulta sumamente atractivo para quienes desean mejorar su carrera, escalar posiciones o llevar a cabo emprendimientos propios. Y más aún en un contexto dinámico e impredecible.
"Cualquiera que aspire a montar su propio negocio o lograr un asenso corporativo necesita formalizar su conocimiento en el mundo de los negocios", comenta Gustavo Genoni, director del MBA de la Universidad Torcuato Di Tella ( UTDT ), programa que escaló cinco posiciones respecto de 2007 y se ubicó en el puesto número 11 del ranking de MBA de América latina ( www.utdt.edu ). Para los directivos de la institución, el ascenso es el resultado de una fuerte apuesta a la calidad académica, una gran fortaleza en la producción y difusión de conocimientos y una vasta conexión internacional.
Orientada a formar personas "en Dirección general y que aspiran a llegar a la punta de la pirámide, los contenidos de la UTDT son los mismos que en las mejores universidades del mundo", explica Genoni, y enfatiza que "los profesores han realizado sus doctorados en prestigiosas instituciones y continúan sus investigaciones, además de desempeñar su rol como directivos de empresas, de modo que los alumnos tienen acceso a cursos de calidad".
En un contexto propicio para invertir en formación académica, las instituciones se focalizan en diferentes aspectos para atraer a los jóvenes y, de esa manera, satisfacer la demanda de profesionalización existente.
Con un abanico de 11 especialidades diferentes, la Universidad de Palermo ( www.palermo. edu ) apuesta a la variedad. "El alumno puede cursar materias introductorias y luego elegir entre diferentes orientaciones que van desde las más tradicionales hasta otras sumamente innovadoras como la de Entretenimiento y Medios", indica Daniel Seva, de la Universidad de Palermo. Para Natalia Popovsky, directora de ese MBA, "se trata de un programa innovador que comenzó en 2004 y fue el primero en Latinoamérica, y de alguna forma hizo punta y abrió una especialización nueva, debido a la creciente demanda de profesionales en el área".
En este momento, el 60% de los alumnos que cursan el programa son extranjeros. "Podemos generar proyectos entre varias regiones: un contenido se produce en la Argentina y luego se distribuye en otros países y la idea es que alcance su máxima potencia", dice Popovsky. En una época en la que los problemas reales abruman, la industria del entretenimiento hasta puede ser una buena válvula de escape.
Formación en negocios: opciones
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