Hora de examen en el secundario
La escuela secundaria se pone a prueba y rinde examen el primer día de clases, no el último. Por Claudia Romero, doctora en educación y directora del área de Educación de la <STRONG><FONT color=#ff0000>Universidad Torcuato Di Tella (UTDT)</FONT><FONT color=#000000>.</FONT></STRONG><BR>
En ese momento, cuando el año escolar comienza, se emiten indicadores impactantes sobre el estado de la educación. El comienzo del año lectivo produce información relevante, es un laboratorio vivo, que permite analizar la salud escolar general, porque allí se concentran muchos de los principales problemas del universo escolar. Es allí donde se materializan los índices de deserción, abandono y repitencia. Y también donde se comprueba la tremenda desigualdad social que se traduce en discriminación educativa: los que fracasan en el intento de hacer la secundaria son los más pobres.
¿En cuántas escuelas no tuvo lugar el primer día de clases por paros, problemas edilicios, ausencia de profesores? ¿Cuántos jóvenes del interior se trasladaron a otros pueblos, dejando tempranamente sus hogares o viajando horas para poder ir al secundario, porque no tienen escuelas cercanas? ¿Cuántos alumnos están repitiendo y se sentaron otra vez en el mismo banco del año anterior? ¿Cuántos chicos quedaron en la puerta, sin poder entrar, cuántos ni siquiera llegaron hasta la puerta de la escuela, al suponer que "la secundaria no es para mí"?
Este año, centenares de miles de alumnos no comenzaron el secundario, porque la escuela no estaba disponible (faltan escuelas, los edificios no estaban en condiciones, hubo paros) o porque no pudieron vencer los obstáculos que los apartan del camino hacia la escolaridad (la pobreza, la desigualdad, la injusticia social).
En la Argentina, cuatro de cada diez adolescentes están fuera de la escuela secundaria y tres de esos cuatro viven en los hogares más pobres. Sólo el 27% de los hijos de las familias más carenciadas logran el título secundario, mientras que en los sectores medios, para quienes es una práctica natural ir a la escuela secundaria, el 73% de los chicos termina el colegio. Faltan escuelas, pero también faltan profesores, y un docente no se construye en unos pocos meses, necesitamos, por lo menos, cuatro años para formarlo. Esas son las cifras del examen, las notas del sistema educativo en el comienzo de clases.
El próximo examen será seguramente dentro de un año. Hay que construir en muchos sentidos. Construir literalmente escuelas, pero también estrategias eficaces, para que todos los alumnos permanezcan en las aulas, concreten aprendizajes de calidad y se gradúen. Hay que trabajar mucho, y desde ahora, para no repetir y perder el año.