Científicos logran la primera comunicación por telepatía digital

Un equipo de neurocientíficos consiguió, por primera vez, establecer una comunicación directa y consciente entre dos cerebros humanos separados por 7.800 kilómetros de distancia usando “telepatía” digital.

La investigación, publicada en la revista científica Plos One, estuvo liderada por Carles Grau, profesor de Psiquiatría y Psicobiología Clínica de la Universidad de Barcelona, junto a Alvaro Pascual-Leone, investigador de la Universidad de Harvard, y técnicos de la empresa Axilum Robotics.

La prueba se produjo el pasado 28 de marzo, cuando se transmitió la palabra “hola” desde Thiruvananthapuram (India), donde se encontraba el emisor, hasta el cerebro del receptor situado en Estrasburgo (Francia). La palabra se codificó con código binario, formado por 1 y 0, resultando en 140 bits de información transmitidos vía internet.

Un casco con electrodos registró los cambios en el electroencefalograma del emisor cuando pensaba la palabra “hola” en código binario. Los neurocientíficos establecieron un sistema por el cual, cuando el emisor pensaba en mover la mano, la interfaz registraba un 1, y cuando pensaba en mover el pie, registraba un 0, hasta codificar toda la palabra. El receptor recibió vía internet este mensaje mediante una interfaz que convirtió los 140 caracteres que formaban la palabra en fosfenos, destellos de luz que aparecen en su visión periférica.

De esta manera, la persona receptora (con los ojos tapados con una venda), cuando notaba una de estas descargas de luz, interpretaba un 1 y cuando no la notaba interpretaba un 0, hasta decodificar todo el mensaje.

Según los científicos, esta investigación supone “un importante hito” tecnológico que abre futuras líneas de invest gación, como la transmisión directa y no invasiva de las emociones y los sentimientos o la conexión directa de sensores con el cerebro humano mediante la estimulación cerebral.

Aunque resalta su valor demostrativo, para Mariano Sigman, flamante director del Laboratorio de Neurociencias de la UTDT , esta prueba no es algo novedoso. “El valor científico del experimento es cercano a nulo. Esto no es telepatía, sino que se utilizaron técnicas existentes desde hace decenas de años, que se entrelazaron a través de internet”, explicó a PERFIL el biólogo.

Por Martina Rua