Entre otras conclusiones, el estudio dirigido por Germán Lodola, investigador asociado de CIPPEC y profesor de la Di Tella, indica que aunque la Argentina es uno de los países menos desiguales del continente, existen desigualdades definidas por el género, la raza, el estatus urbano-rural y la clase social. Las personas más ricas reciben casi 5 años más de educación formal que las más pobres. Por su parte, 6 de cada 10 mujeres ganan menos que su cónyuge.La Argentina, indica el estudio, tiene uno de los niveles más altos de participación electoral del continente, pero el 65,4% de los argentinos tiene "poco" o "ningún" interés en la política. 

El 39,8% de los argentinos dice que la falta de seguridad y la delincuencia son el mayor problema del país. Siguen la economía (35,5%), la política (6,1%) y los servicios básicos (5,3%).Según la encuesta presentada por CIPPEC, no hay grandes diferencias en las bases sociales entre las fuerzas políticas. Apenas el 27% de los argentinos afirma simpatizar con un partido político. De ellos, el 62,2% se inclina por el Frente para la Victoria. Le siguen el peronismo disidente (12,7%), la Unión Cívica Radical (10,1%), los partidos provinciales (4,8%), el Partido Socialista (2,4%), el PRO (2,1%) y otros partidos (5,8%).Los argentinos promedian 5,7 puntos en una escala ideológica donde 1 marca la izquierda y, 10, la derecha. Existe también un alto nivel de apoyo al rol intervencionista del Estado que trasciende las identificaciones partidarias. Con 84,1 puntos en una escala de 0 a 100, nuestro país está entre los países con los valores más altos del continente.