"Aventurar lo que va a suceder una vez Raúl Castro deje la presidencia del país es muy difícil, aunque es posible que se lleve a cabo una apertura más política y económica", sostuvo Diamint, profesora de la Universidad de Di Tella e investigadora principal del Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas (Conicet).

Bajo esa premisa, "si esto no funciona y empieza a haber un desgaste, ya no hay un líder histórico que los convenza del beneficio de la Revolución, de modo que un deterioro del modelo político ya no sería atribuible a los Castro, sino a la persona a cargo de la presidencia", comentó la docente universitaria.

El 4 de septiembre comenzaron en Cuba los comicios municipales para elegir en las asambleas barriales a los candidatos a concejales.

El sistema electoral de ese país prevé posteriormente la elección de los integrantes de las diversas asambleas provinciales y de la unicameral Asamblea Nacional del Poder Popular, responsable de designar al nuevo Consejo de Estado y al presidente que reemplazará en su cargo al actual mandatario.

También podría ocurrir que en Cuba no cambiase nada significativo después del proceso electoral, el cual se prolongará por los próximos cinco meses, "y lo único que se modifique sea la única persona al frente del proceso", expresó la investigadora, jefa del gabinete del Ministerio de Defensa de su país en el año 2005.

La analista observó que algunos grupos sociales dedicados a actividades barriales y que no se identifican con el Gobierno también participarán en las asambleas populares para nominar a sus postulantes a concejales.

"O sea, que puede haber un grado de diversidad con gente que ya no está históricamente asociada al partido gobernante", destacó.

Es la primera vez que estos grupos no estructurados perciben que "hay algunos canales que antes no existían, porque hay una apertura política limitada conectada a la apertura económica", explicó Diamint.

El agotamiento del modelo económico vigente en la isla es uno de los motivos por el que los cubanos han comenzado a organizarse, observó.

El cambio económico "no se puede controlar totalmente, lo que genera otro tipo de cambio que no se espera por parte del Gobierno", dado que "no se pueden contener todos los efectos secundarios que se producirán en este sentido", añadió la experta.

Cambio histórico

Por primera vez desde la Revolución Cubana de 1959, los hermanos Castro dejarán de estar al frente del Gobierno cubano.

Tras estar 58 años, "la ausencia de Castro en el poder es algo que modificaría la historia de Cuba de medio siglo", afirmó la docente universitaria, integrante del Consejo Asesor en Asuntos de Desarme del Secretario General de las Naciones Unidas.

Las reglas del actual proceso electoral en Cuba, aclaró Diamint, no presentan modificaciones con respecto a otros años, por lo que la única diferencia es que ningún Castro se postula al mayor cargo jerárquico del Poder Ejecutivo.

El actual presidente de Cuba ha insistido en que concluirá su mandato tras las elecciones generales que se celebrarán entre 2017 y 2018.