En los medios

El Economista
24/02/17

Economía bipolar

La economía argentina está atravesando una fase bipolar: sube la inversión y baja la confianza según el Indice de Confianza del Consumidor (ICC) de la UTDT, cayó 8,5% en febrero con respecto a enero


Por un lado, surgen brotes verdes (en la comparación contra meses previos, aunque todavía no en el cómputo interanual, que sigue en rojo), bajó la inflación y navega hace varios meses en 16% anualizada y, como anunció ayer Orlando Ferreres, sube la inversión privada. En números: según el economista, la inversión subió 5,3% en enero y la compra de maquinarias y equipos voló 11,9%. Los empresarios, parece, apuestan. Algunos, por lo menos.

Sin embargo, y por otro lado, se deterioraron las expectativas hacia futuro, suben las expectativas de inflación (ya superan el 31% promedio, según la UTDT), los brotes no se sienten en “la calle” (como admitió Nicolás Dujovne en su conferencia hace unos días) y, como dijo ayer la UTDT, el Indice de Confianza del Consumidor (ICC) cayó 8,5% en febrero con respecto al mes de enero y, en la comparación interanual, se desplomó 10,8%.

La polea de transmisión se obturó y las mejoras (tenues) no son percibidas por el gran público, fastidiado aun por la inflación (cuando los precios empezaban a subir menos, vuelven los ajustes tarifarios?), un empleo que crece pero poco (aun no se recuperó lo perdido en 2016) y una reactivación más estadística que real.

Según el Gobierno, pasados estos primeros meses complicados en el frente inflacionario, una vez que lleguen los nuevos sueldos, la inflación retorno a los niveles de 1%-1,5% y el empleo empiece a crecer a niveles mayores que 20.000 por mes, la gente sentirá esa recuperación. Pero, como decía Tusam, puede fallar.