En los medios

La Prensa
22/08/16

Blanqueo, ¿qué podría salir mal?

Hay dos escenarios para los bonos argentinos y dependen, entre otras cosas, de las elecciones 2017.

Por Germán Fermo
Hoy resulta que es lo mismo ser derecho que traidor, ignorante, sabio o chorro, generoso o estafador. Todo es igual, nada es mejor. Lo mismo un burro que un gran profesor. No hay aplazaos, ni escalafón, los inmorales nos han igualao’’. Este blanqueo unió a todos los integrantes del brillante y premonitorio Discépolo en un único objetivo: recaudación fiscal.

Cuidado entonces, invertir en un bono argentino, significa ni más ni menos, que estás long el tango cambalache, en especial para un país que en sólo unos pocos meses ya emitió 30 mil millones de dólares de nueva deuda con provincias como Buenos Aires, Salta y Chaco, emitiendo irresponsablemente bonos con cupones en torno al 9% en un mundo donde duration similar vale sólo 2.5%. Veo que somos gradualistas en todo menos en endeudarnos: difícil cambiar algo así.

FAMOSO DIEGO
Especialmente aquellos inversores que decidan acogerse al sinceramiento fiscal y quieran al mismo tiempo recuperar rápidamente el famoso diego podrían entre una de las opciones posibles (no es la única) comprar bonos soberanos argentinos. Estos bonos están exentos de todo tributo a diferencia por ejemplo, de un ADR que tributaría entre otras cosas el 15% de diferencia entre precio de compra y venta en caso que se decidiese realizar ganancias en algún momento. Por cuestiones de eficiencia fiscal, estos bonos dominan en general al resto de los activos dado que su eventual aumento de precio y cupones no tributan ningún impuesto a diferencia de otros activos argentinos o extranjeros que en general, quedan taxados offshore de alguna forma. Pero esta potencial eficiencia fiscal expone al blanqueador a riesgo Cambalache.

En perspectiva. Cuando el kirchnerismo pierde en las PASO del 2013, los bonos largos rendían aproximadamente 13%. Desde ahí comenzó un proceso de deskirchnerización de la curva soberana, aspecto que se intensificó cuando Cambiemos sorprende en las elecciones presidenciales del 2015 llevando a esta curva actualmente a niveles de 6.5% de yield. El rally en la parte larga de la curva soberana argentina ha sido enorme con 650 puntos básicos de compresión de spreads o lo que es lo mismo: baja de riesgo país. Si hacemos un cálculo rápido, el valor de un bono con duration 10 es 65% superior hoy que en 2013, más carry. Como vemos, el proceso de desperonización de la curva argentina en el mejor de los casos está un 80% terminado. Si bien a estos bonos en la medida que el contexto local e internacional aguanten, les queda unos 150 puntos básicos de compresión de spreads, gran parte del recorrido ya está hecho. Y es en este punto en donde aquel inversor no acostumbrado a tradear la parte larga de la curva soberana argentina debería preguntarse qué es lo mejor que puede pasar pero también que es lo peor que puede ocurrir en este Cambalache de país ahora, emisor de deuda soberana y provincial, que hemos construido todos juntos, con especial ayuda del peronismo.

ESCENARIOS

◆Escenario 1: Si sale bien a un año vista. Supongamos que la macrización de la curva soberana argentina continúa en los próximos 12 meses llevando a la misma desde los 6,55% actuales a 5,50%. O sea, una baja de riesgo país de 95 puntos básicos. El inversor (blanqueador o no) tendría una ganancia de capital de aproximadamente 12,60% más carry aproximado de 6,55%. En total, estar long Cambalache le daría una ganancia de 19,15%. Si un blanqueador comprase Cambalache 2046 recuperaría el impuesto especial y encima se llevaría una ganancia aproximada de 10%.

◆ Escenario 2: A mi pesar lamentablemente, el Presidente Macri no puede develar el siguiente interrogante: ¿qué tan efímero será este gobierno? Supongamos por un instante que en las elecciones del año próximo le va muy mal fruto de su gradualismo miedoso, perdedor e inútil y su desprolijidad e insensibilidad en el manejo de temas tan cruciales como tarifas, por ejemplo. Comenzaría a pricearse nuevamente la desmacrización de la curva de bonos o lo que es lo mismo, su reperonización. Supongamos que si este escenario ocurriese, la curva de yields quedase a mitad de camino entre los 6,50% de hoy y los 13% del kirchnerismo 2013 o sea, en el horno en un 10% de yield. En este caso, y muy en especial para aquéllos que están contemplando comprar bonos blanqueadores y nunca padecieron la volatilidad de la parte larga de una curva emergente, tengan muy en cuenta el daño que le puede hacer a tu riqueza sólo si el mercado en algún futuro no tan lejano decidiese pricear peronismo nuevamente o si aún con macrismo te explota un gemelo del Brexit pero esta vez te lo pricean como cisne negro genuino. ¿Si el S&P te corrige 20% a dónde vas a buscar a la curva argentina? ¿Sabías que el S&P está en máximo histórico? ¿Sabías que la parte larga de toda curva emergente se correlaciona directamente a la dinámica del S&P? Ojo, porque escucho a mucho contador tributarista recomendando cosas y de esto, con todo respeto, no saben nada ◗


 * Ph.D. Director de Macro Finance y de la Maestría en Finanzas de laUTDT