La relación con el gobierno argentino no sufrirá grandes modificaciones tras el arrollador triunfo de los republicanos en Estados Unidos, aunque tal vez haya cierta presión adicional en el campo de las relaciones comerciales.

Así lo expresaron a LA NACION expertos en relaciones internacionales, que indicaron que la posibilidad de mejorar las relaciones bilaterales depende más de los pasos que dé la Argentina que de la dinámica de la política interna norteamericana.

Claudio Loser, director del think tank Centennial Group, dijo que "los republicanos le van a poner más presión a la Argentina, tanto en el campo de los bonistas como en el comercial, donde el partido que ganó es más proclive a los acuerdos de libre comercio". El ex ejecutivo del FMI sostuvo que, en cuanto al tema de los holdouts, no sería ilógico que "haya acciones en el congreso de votos de censura contra la Argentina, por no reconocer el derecho de los acreedores a cobrar sus deudas".

El experto Roberto Russell, de la Universidad Di Tella, afirmó: "La relación bilateral tiene más que ver con lo que hagamos nosotros que con que haya un Congreso más o menos republicano; desde hace varios años el vínculo es distante por un manejo amateur, como lo demuestra la última carta de la presidenta Kirchner a Obama, que se conjuga con cierto hartazgo de Estados Unidos".

El profesor de la American University Arturo Porzecanski expresó: "No creo que el resultado de las elecciones legislativas vaya a tener impacto alguno sobre las relaciones bilaterales, porque ellas seguirán bajo el control del Poder Ejecutivo, que no ha cambiado; y porque las deterioradas relaciones entre la Argentina y los Estados Unidos no son una prioridad para el Congreso, ni el viejo ni el nuevo".

En tanto, el experto Jorge Castro sostuvo que "del lado argentino la política exterior está subordinada a la política doméstica", tal como lo demuestra la retórica beligerante hacia la administración Obama por su posición en el caso de los fondos buitre. Sin embargo, recordó Castro, "el gobierno de Obama se presentó dos veces ante la justicia norteamericana respaldando a la Argentina por el caso del pari passu y ahora, cada vez que la Argentina plantea una agresión, Estados Unidos no quiere plantear un conflicto". Sí puede pasar, agregó, que los republicanos pretendan acelerar los acuerdos comerciales con otros países y eso choque con la posición argentina de no modificar el statu quo.

El comercio bilateral, según Abeceb.com, desde enero presenta un rojo para la Argentina de 3439 millones de dólares, frente a 2413 millones del mismo período de 2013. En tanto, las inversiones directas llegaron a 1371 millones de dólares en 2012, último período registrado oficialmente.